Hola amigos desde una PC totalmente nueva seguimos el Marcaje contra el Imperio, conforme avanzan los días este asunto se pone más interesante pues Bush tiene a su enemigo número uno en casa, el Congreso tal parece empieza a ser clave para el destino de esa nación y porque no, incluso a futuro para la nuestra. El intento de invadir nuestro país México por medio de privatizaciones responde a la necesidad de EUA de control al petroleo, si en estos momentos se salí de control México del Imperio más posibilidad de caer Bush tendría porque se hubiese fortalecido el movimiento de Izquierda Latina, pero a pesar de que frenaron el triunfo de AMLO, creo que es un boomerang que se les esta regresando, es decir, a pesar de que Calderón esta usurpando y estrategicamente el Imperio tiene el control AL PUEBLO MÉXICO LE HAN INYECTADO MOTIVOS Y MUCHOS PARA LEVANTARSE, DESPERTAR Y DEFENDER SU SOBERANÍA.
Estados Unidos a favor de la utilización de bombas racimo
BBC Mundo
Estados Unidos rechazó un llamado internacional para que prohíba el uso de bombas racimo y defendió su uso como opción militar, argumentando que éstas tienen un lugar en los conflictos armados hasta tanto los países respeten las reglas de su utilización
Un portavoz del departamento de Estado de EE.UU., Sean McCormack, declaró que los militares de su país ya habían realizado mejoras técnicas a sus propias bombas racimo y habían estudiado con detenimiento cómo eran utilizadas.
Poco antes, en la declaración final de una conferencia realizada esta semana en Noruega, 46 países se pronunciaron a favor de un tratado que impida la utilización de estas armas a partir de 2008.
El objetivo es prohibir el uso, producción, transferencia y almacenamiento de este tipo de municiones.
Tratado
Las negociaciones en torno a lograr una prohibición de las bombas racimo continuarán durante una serie de reuniones previstas a realizarse en Perú, Austria e Irlanda.
Sin embargo, algunas de las naciones con mayor poder militar a nivel mundial -entre ellas EE.UU., Rusia y China- no asistieron a la conferencia.
Este factor, según señala el enviado especial de la BBC, Stuart Hughes, afectaría la credibilidad de cualquier nuevo tratado ya que éste estaría abierto a debate.
Quienes se oponen a las bombas racimo, que son esparcidas antes del impacto, sostienen que éstas generalmente no explotan de inmediato pero -al igual que las minas terrestres- son capaces de provocar la muerte de civiles años después, debido a que quedan activas sin estallar. Las bombas racimo son centro de controversia. Aunque son armas que pueden causar daño indiscriminado incluso luego de su lanzamiento y también pueden fallar en el blanco, son consideradas armas militares muy efectivas ya que cubren grandes extensiones de territorio.
Así, algunos países -señala el especialista de defensa y seguridad de la BBC, Rob Watson- insisten en el desarrollo de bombas de este tipo más inteligentes. Es decir, que tengan más precisión y no dejen tantas sub-municiones sin estallar.
¿Son los planes de Bush contra Irán una huída hacia adelante?
Immanuel Wallerstein
Traducción de Ramón Vera Herrera, revisada para Rebelión por Manuel Talens
Los franceses tienen una expresión, fuite en avant (literalmente "huída hacia adelante"), que los diccionarios de lengua inglesa traducen como headlong rush, es decir, "lanzarse a algo de cabeza". Pero dicha traducción pierde el auténtico significado. Una fuite en avant es algo que uno hace cuando se halla en situación desesperada y espera salvarse utilizando la misma táctica o incluso acentuándola, con lo cual crea una situación en la que espera que la gente se sienta obligada a respaldarlo. ¿Es esto lo que George W. Bush intenta hacer en Irán?
Sabemos dos cosas acerca del régimen de Bush. Su posición en Iraq es insostenible y ahora está ampliamente impugnada inclusive en Estados Unidos. El llamado a una retirada crece día con día y surge de todas partes. Y sabemos que, desde 2001, los neoconservadores y Dick Cheney han estado pujando por emprender un ataque militar contra Irán con el objetivo de cambiar el régimen. Entonces, éste podría ser el momento.
Estados Unidos ha enviado su flota a la región y puso al mando a un almirante conocido por su eficacia en ataques mar-aire. Washington emite virtualmente a diario comunicados que señalan las supuestas malas acciones de los iraníes. En resumen, Estados Unidos agita el sable. Es más, muchísimas personas parecen tomar esto muy seriamente. Tres de los militares retirados de más alto rango en Estados Unidos han advertido públicamente contra la locura que significa atacar Irán. También lo ha hecho Zbigniew Brzezinski, a quien no podemos calificar de paloma. Así también lo han hecho incontables políticos y diplomáticos de todo el mundo. Pero Cheney ha dejado claro que el gobierno estadunidense hace lo que le place, sin importar cuántos oponentes tenga, o quiénes sean.
¿Apoyará alguien a Estados Unidos en tal aventura? De hecho, muy pocos. No lo respalda el Congreso estadunidense, aunque Bush y Cheney cuenten con el hecho de que sería más duro para los demócratas oponerse a ellos sobre el asunto Irán que sobre Iraq. Tendrán el respaldo del gobierno israelí. Y creen contar con el apoyo de los sauditas. Pero eso es malinterpretar la posición saudita. Éstos, por supuesto, tienen la preocupación de limitar las pretensiones iraníes de hegemonizar la región y la preocupación de contener las posibilidades de una militancia chiíta en estados dominados por sunitas, primero que nada en Arabia Saudita. Pero los sauditas también han dejado claro que un ataque militar a Irán perjudicará los objetivos políticos sauditas más que ayudarlos. La mediación activa de los sauditas en la disputa entre Hamas y Fatah en Palestina indica que con toda claridad buscan distanciarse de la estrategia estadunidense en Oriente Próximo. Y, en Europa, inclusive los británicos están expresando abiertamente su disgusto por la idea de un ataque contra Irán.
Así que supongamos que, pese a todo esto, Bush y Cheney decidan emprender su atropellado y súbito avance hacia la guerra, su fuite en avant para intentar salvar su desastrosa situación. ¿Qué pasaría, y por qué harían algo así? Lo que pasaría parece claro. Un ataque aéreo sobre Irán no lograría el objetivo de desmantelar el programa nuclear iraní, aunque podría dañarlo. Enviar tropas, si acaso Estados Unidos encuentra a alguien a quien enviar, conduciría a una cuota de muertes estadunidenses muy alta. El gobierno iraní se fortalecería políticamente, en casa y por todo el mundo islámico. Los rusos y los chinos respaldarían de facto a Irán.
Y lo peor de todo para Estados Unidos es que aquellos a los que en Iraq considera sus aliados más cercanos comenzarían a vociferar en un llamado en pos de una retirada estadunidense inmediata de Iraq. El anterior primer ministro Ibrahim Jaafari ya comenzó a andar ese camino. Nadie en Iraq, nadie, quiere que Estados Unidos ataque a Irán, y en el plano emocional, nadie se pone del lado de Estados Unidos en esta cuestión. Ahora, Cheney es un político inteligente, y puede ver todo esto, pienso yo. Así que, ¿por qué, pese a todo, puja por la guerra? ¿Acaso podemos jugar con la idea de que crear un desastre aún mayor para Estados Unidos le resulta la mejor opción disponible para lograr sus objetivos políticos reales?
Cheney (y Bush) saben que tendrán el control del gobierno de Estados Unidos sólo por dos años más. Después, no saben quién estará en el poder, pero tienen muchas razones para pensar que no serán sus clones. Lo último que quisieran es una transferencia pacífica del poder a cualquiera que pueda desmantelar lo que han construido y que intente (tan sólo que intente) resituar a Estados Unidos donde estaba -en el país e internacionalmente- en los años de las presidencias de Richard Nixon a Bill Clinton.
Entonces, buscan aumentar, no disminuir, las querellas internas en Estados Unidos. Buscan desmantelar más el marco de libertades civiles, uno que nunca fue perfecto pero que podía darse el lujo de mantener algunas restricciones al poder gubernamental. Buscan mayores regresiones en el ámbito de los derechos sociales. Buscan crear un Estados Unidos más oscuro en un mundo más oscuro.
¿Puede alguien detenerlos? Posiblemente. Existe ahora una extendida resistencia, muy verbalizada, en las fuerzas armadas. Por primera vez en mi vida, encuentro en la prensa especulaciones sobre un golpe militar. Dudo que vaya a ocurrir, pero la mera especulación muestra hasta qué punto son vastas los recelos. Y existe también la resistencia de los políticos que en su gran mayoría son esencialmente moderados de centro y cuya mayor preocupación es mantener las posiciones para las que los eligieron y que son personas que vuelan a donde los lleve el viento de su base electoral. ¿Será esto suficiente? Es difícil decirlo, pero veremos la situación con mayor claridad en los próximos dos o tres meses.
Original en inglés: http://www.binghamton.edu/fbc/commentr.htm
Irán envía cohete al espacio
Irán anunció haber lanzado su primer cohete espacial. Un aviso hecho en la televisión estatal dijo que llevaba equipos de investigación.
El anuncio no dio más detalles sobre su contenido.
El director del Centro de Investigación Aeroespacial de Irán Mohsen Bahrami, dijo que "todas las pruebas se han hecho dentro de las unidades industriales del país según las normas internacionales. La construcción del cohete ha sido realizada por los expertos del Centro de Investigación Aeroespacial y del Centro de Ingeniería del ministerio de Agricultura".
Sin embargo, Ali Akbar Golrou, un alto funcionario aeroespacial iraní, dijo a la agencia de noticias Fars que el cohete no había logrado mantenerse en órbita.
En 2005, Irán ya había puesto un satélite en el espacio, el Sina-1, que fue transportado por un cohete ruso.
Sin embargo, Irán había anunciado que modificaría su misil Shahab-3 para lanzar satélites.
En septiembre de 2006, también había dicho que estaba en capacidad de fabricar un motor de plasma para guiar al satélite en el espacio.
Aún no se sabe si el actual cohete iraní es esa modificación o un modelo nuevo.
El anuncio se da en una semana en la que se incrementó la tensión a causa del programa nuclear iraní, cuando el país no se pronunció sobre el plazo dado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para que detuviera sus actividades de enriquecimiento de uranio.
El lunes, los cinco miembros permanentes del Consejo y Alemania se reunirán para discutir las sanciones que podría recibir Irán tras hacer caso omiso de la resolución 1737 del organismo.
Estados Unidos a favor de la utilización de bombas racimo
BBC Mundo
Estados Unidos rechazó un llamado internacional para que prohíba el uso de bombas racimo y defendió su uso como opción militar, argumentando que éstas tienen un lugar en los conflictos armados hasta tanto los países respeten las reglas de su utilización
Un portavoz del departamento de Estado de EE.UU., Sean McCormack, declaró que los militares de su país ya habían realizado mejoras técnicas a sus propias bombas racimo y habían estudiado con detenimiento cómo eran utilizadas.
Poco antes, en la declaración final de una conferencia realizada esta semana en Noruega, 46 países se pronunciaron a favor de un tratado que impida la utilización de estas armas a partir de 2008.
El objetivo es prohibir el uso, producción, transferencia y almacenamiento de este tipo de municiones.
Tratado
Las negociaciones en torno a lograr una prohibición de las bombas racimo continuarán durante una serie de reuniones previstas a realizarse en Perú, Austria e Irlanda.
Sin embargo, algunas de las naciones con mayor poder militar a nivel mundial -entre ellas EE.UU., Rusia y China- no asistieron a la conferencia.
Este factor, según señala el enviado especial de la BBC, Stuart Hughes, afectaría la credibilidad de cualquier nuevo tratado ya que éste estaría abierto a debate.
Quienes se oponen a las bombas racimo, que son esparcidas antes del impacto, sostienen que éstas generalmente no explotan de inmediato pero -al igual que las minas terrestres- son capaces de provocar la muerte de civiles años después, debido a que quedan activas sin estallar. Las bombas racimo son centro de controversia. Aunque son armas que pueden causar daño indiscriminado incluso luego de su lanzamiento y también pueden fallar en el blanco, son consideradas armas militares muy efectivas ya que cubren grandes extensiones de territorio.
Así, algunos países -señala el especialista de defensa y seguridad de la BBC, Rob Watson- insisten en el desarrollo de bombas de este tipo más inteligentes. Es decir, que tengan más precisión y no dejen tantas sub-municiones sin estallar.
¿Son los planes de Bush contra Irán una huída hacia adelante?
Immanuel Wallerstein
Traducción de Ramón Vera Herrera, revisada para Rebelión por Manuel Talens
Los franceses tienen una expresión, fuite en avant (literalmente "huída hacia adelante"), que los diccionarios de lengua inglesa traducen como headlong rush, es decir, "lanzarse a algo de cabeza". Pero dicha traducción pierde el auténtico significado. Una fuite en avant es algo que uno hace cuando se halla en situación desesperada y espera salvarse utilizando la misma táctica o incluso acentuándola, con lo cual crea una situación en la que espera que la gente se sienta obligada a respaldarlo. ¿Es esto lo que George W. Bush intenta hacer en Irán?
Sabemos dos cosas acerca del régimen de Bush. Su posición en Iraq es insostenible y ahora está ampliamente impugnada inclusive en Estados Unidos. El llamado a una retirada crece día con día y surge de todas partes. Y sabemos que, desde 2001, los neoconservadores y Dick Cheney han estado pujando por emprender un ataque militar contra Irán con el objetivo de cambiar el régimen. Entonces, éste podría ser el momento.
Estados Unidos ha enviado su flota a la región y puso al mando a un almirante conocido por su eficacia en ataques mar-aire. Washington emite virtualmente a diario comunicados que señalan las supuestas malas acciones de los iraníes. En resumen, Estados Unidos agita el sable. Es más, muchísimas personas parecen tomar esto muy seriamente. Tres de los militares retirados de más alto rango en Estados Unidos han advertido públicamente contra la locura que significa atacar Irán. También lo ha hecho Zbigniew Brzezinski, a quien no podemos calificar de paloma. Así también lo han hecho incontables políticos y diplomáticos de todo el mundo. Pero Cheney ha dejado claro que el gobierno estadunidense hace lo que le place, sin importar cuántos oponentes tenga, o quiénes sean.
¿Apoyará alguien a Estados Unidos en tal aventura? De hecho, muy pocos. No lo respalda el Congreso estadunidense, aunque Bush y Cheney cuenten con el hecho de que sería más duro para los demócratas oponerse a ellos sobre el asunto Irán que sobre Iraq. Tendrán el respaldo del gobierno israelí. Y creen contar con el apoyo de los sauditas. Pero eso es malinterpretar la posición saudita. Éstos, por supuesto, tienen la preocupación de limitar las pretensiones iraníes de hegemonizar la región y la preocupación de contener las posibilidades de una militancia chiíta en estados dominados por sunitas, primero que nada en Arabia Saudita. Pero los sauditas también han dejado claro que un ataque militar a Irán perjudicará los objetivos políticos sauditas más que ayudarlos. La mediación activa de los sauditas en la disputa entre Hamas y Fatah en Palestina indica que con toda claridad buscan distanciarse de la estrategia estadunidense en Oriente Próximo. Y, en Europa, inclusive los británicos están expresando abiertamente su disgusto por la idea de un ataque contra Irán.
Así que supongamos que, pese a todo esto, Bush y Cheney decidan emprender su atropellado y súbito avance hacia la guerra, su fuite en avant para intentar salvar su desastrosa situación. ¿Qué pasaría, y por qué harían algo así? Lo que pasaría parece claro. Un ataque aéreo sobre Irán no lograría el objetivo de desmantelar el programa nuclear iraní, aunque podría dañarlo. Enviar tropas, si acaso Estados Unidos encuentra a alguien a quien enviar, conduciría a una cuota de muertes estadunidenses muy alta. El gobierno iraní se fortalecería políticamente, en casa y por todo el mundo islámico. Los rusos y los chinos respaldarían de facto a Irán.
Y lo peor de todo para Estados Unidos es que aquellos a los que en Iraq considera sus aliados más cercanos comenzarían a vociferar en un llamado en pos de una retirada estadunidense inmediata de Iraq. El anterior primer ministro Ibrahim Jaafari ya comenzó a andar ese camino. Nadie en Iraq, nadie, quiere que Estados Unidos ataque a Irán, y en el plano emocional, nadie se pone del lado de Estados Unidos en esta cuestión. Ahora, Cheney es un político inteligente, y puede ver todo esto, pienso yo. Así que, ¿por qué, pese a todo, puja por la guerra? ¿Acaso podemos jugar con la idea de que crear un desastre aún mayor para Estados Unidos le resulta la mejor opción disponible para lograr sus objetivos políticos reales?
Cheney (y Bush) saben que tendrán el control del gobierno de Estados Unidos sólo por dos años más. Después, no saben quién estará en el poder, pero tienen muchas razones para pensar que no serán sus clones. Lo último que quisieran es una transferencia pacífica del poder a cualquiera que pueda desmantelar lo que han construido y que intente (tan sólo que intente) resituar a Estados Unidos donde estaba -en el país e internacionalmente- en los años de las presidencias de Richard Nixon a Bill Clinton.
Entonces, buscan aumentar, no disminuir, las querellas internas en Estados Unidos. Buscan desmantelar más el marco de libertades civiles, uno que nunca fue perfecto pero que podía darse el lujo de mantener algunas restricciones al poder gubernamental. Buscan mayores regresiones en el ámbito de los derechos sociales. Buscan crear un Estados Unidos más oscuro en un mundo más oscuro.
¿Puede alguien detenerlos? Posiblemente. Existe ahora una extendida resistencia, muy verbalizada, en las fuerzas armadas. Por primera vez en mi vida, encuentro en la prensa especulaciones sobre un golpe militar. Dudo que vaya a ocurrir, pero la mera especulación muestra hasta qué punto son vastas los recelos. Y existe también la resistencia de los políticos que en su gran mayoría son esencialmente moderados de centro y cuya mayor preocupación es mantener las posiciones para las que los eligieron y que son personas que vuelan a donde los lleve el viento de su base electoral. ¿Será esto suficiente? Es difícil decirlo, pero veremos la situación con mayor claridad en los próximos dos o tres meses.
Original en inglés: http://www.binghamton.edu/fbc/commentr.htm
Irán envía cohete al espacio
Irán anunció haber lanzado su primer cohete espacial. Un aviso hecho en la televisión estatal dijo que llevaba equipos de investigación.
El anuncio no dio más detalles sobre su contenido.
El director del Centro de Investigación Aeroespacial de Irán Mohsen Bahrami, dijo que "todas las pruebas se han hecho dentro de las unidades industriales del país según las normas internacionales. La construcción del cohete ha sido realizada por los expertos del Centro de Investigación Aeroespacial y del Centro de Ingeniería del ministerio de Agricultura".
Sin embargo, Ali Akbar Golrou, un alto funcionario aeroespacial iraní, dijo a la agencia de noticias Fars que el cohete no había logrado mantenerse en órbita.
En 2005, Irán ya había puesto un satélite en el espacio, el Sina-1, que fue transportado por un cohete ruso.
Sin embargo, Irán había anunciado que modificaría su misil Shahab-3 para lanzar satélites.
En septiembre de 2006, también había dicho que estaba en capacidad de fabricar un motor de plasma para guiar al satélite en el espacio.
Aún no se sabe si el actual cohete iraní es esa modificación o un modelo nuevo.
El anuncio se da en una semana en la que se incrementó la tensión a causa del programa nuclear iraní, cuando el país no se pronunció sobre el plazo dado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para que detuviera sus actividades de enriquecimiento de uranio.
El lunes, los cinco miembros permanentes del Consejo y Alemania se reunirán para discutir las sanciones que podría recibir Irán tras hacer caso omiso de la resolución 1737 del organismo.
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