por Federación de Militares Retirados A continuación presentamos una carta enviada a la redacción de nuestra página por los compañero de la Federación de Militares Retirados, la cual hace un breve análisis del papel que juega el ejército en esta época en el país, época que tiene el carácter de revolucionaria.
Cuando nuestro país ve amenazada su estabilidad y está a un paso de sufrir convulsiones sociales en razón de la ya inocultable inconformidad de millones de ciudadanos reacios –cuando menos- a un gobierno impopular, falto de credibilidad e ilegítimo, caracterizado por su incapacidad, ineficiencia, corrupción e impunidad en la administración de la nación, gobierno este de reconocida filiación y doctrina reaccionaria propia de grupos derechistas, involucionistas, oligárquicos, de empresarios insaciables y lo mas grave: entreguista y postrado a los designios del imperio del norte contra la soberanía de México. Es entonces que nace la pregunta: ¿Los militares, donde están? ¿Dónde su patriotismo? ¿Dónde su nacionalismo? ¿Es posible que permanezcan indiferentes ante presagios de catástrofe? ¿Que puede esperar el pueblo de sus soldados? ¿Solamente represión? Surgen esas interrogantes, porque desde el 31 de noviembre de 2006, fecha de la teatral ceremonia castrense montada para instalar en la Presidencia de la República a quien no pudo demostrar a la nación su triunfo electoral, han ocurrido otros funestos signos que desprestigian al Ejército Mexicano e infunden temor y sospecha a la ciudadanía porque las autoridades responsables, no procuraron impartir justicia ni demostraron respeto a la gente que supuestamente los puso en funciones; antes bien, sembraron la certeza del encubrimiento de presuntos delitos y fechorías contra los Derechos Humanos cometidos por un General, Jefes, Oficiales y Tropa. Consecuentemente, propios y extraños de elemental sentido común, se convencieron paso a paso y ante los hechos, que los Altos Mandos son copartícipes en la trama y están prestos a sostener en el poder al presunto Ejecutivo, protegiéndolo con esmerado afán cuando deba presentarse ante el pueblo que lo repudia. Se explica entonces la promesa falaz del agradecido personaje de no incluir a las Fuerzas Armadas en la austeridad pregonada, mentira es porque excluyó a otros sectores castrenses, entre ellos resultaron mayormente afectados los que se encuentran en situación de Retiro
El Pueblo de México, a pesar de todo, dígase lo que se diga, mantiene aún la esperanza en su Ejército, en sus soldados; sabe que llegado el momento abrazarán la causa de los suyos, porque son el origen mismo del instituto armado de la Revolución Mexicana y porque su reivindicación y retorno a esa filosofía libertaria no podría ser de otra manera. En este instante a ningún mexicano le quitan de la cabeza que a Felipe del Sagrado Corazón de Jesús Calderón Hinojosa solo lo sostiene en el poder el Ejército Mexicano, más que la Marina Armada, aunque también es cierto que cuenta con otros poderes de facto. Si llegaran a fallar las Fuerzas Armadas Mexicanas, clamarían, él y esa apátrida caterva, por el auxilio de los norteamericanos. No hay duda, ya son excesivos los indicios.
El Alto Mando y los Mandos Superiores enajenaron al Ejército del Pueblo, traicionaron la tantas veces alegada lealtad a las Instituciones de la Constitución de 1917 para arrastrarlo -como en los viejos tiempos de la realeza- contra el Estado Laico de la Reforma y de la Revolución Mexicana. Confían demasiado en que ya dio los resultados apetecidos, la conspiración contra la educación pública y demás instituciones de la Carta Magna. Pero se equivocan si piensan que ya no hay soldados para quienes el honor, la honestidad, el patriotismo y la lealtad al pueblo no tienen precio, se mantuvieron atentos en silencio pero nunca apagados, estáticos, indolentes o frustrados, están alertas de pie como en los tiempos de la instrucción cuartelera, como lo aprendieron en las Escuelas militares, en el H. Colegio Militar, en la Escuela Superior de Guerra porque advierten que la tropa es conducida a un enfrentamiento con su pueblo, como si los mandos no hubieran aprendido las lecciones de la historia.
En este punto, vale recordar a Nicolás Guillén: No se porqué piensas tú, soldado que te odio yo, si somos la misma cosa tú, yo.--- Tu eres pobre, lo soy yo; soy de abajo, lo eres tú, ¿de donde has sacado tú, soldado, que te odio yo?--- Me duele que a veces tú te olvides de quien soy yo; ¡caramba!, si yo soy tú, lo mismo que tú eres yo.--- Pero no por eso yo he de malquererte tú; si somos la misma cosa yo, tú;--- no se porque piensas tú soldado que te odio yo.---Ya nos veremos yo y tú, juntos en la misma calle, hombro con hombro, tú y yo, sin odios ni yo ni tú, pero sabiendo tú y yo, a donde vamos yo y tú.--- ¡ No se porqué piensas tú, soldado que te odio yo !
Que no olviden que el soldado mexicano es el mismo pueblo, la aristocrática elite infiltrada en los mandos ya no los asustará con fantasmas comunistas o terroristas, ni mucho menos con Satanás o el infierno, tampoco los engañarán con “spots”, ni manipularán mediante “lavados de cerebro” a los que se encuentren en Servicio Activo. En cuanto a los Retirados es sabido que muchos se mantienen al margen por razones familiares, de edad, de salud, pero entre ellos, probadamente, no existen los cobardes cuando el deber llama.-LA PATRIA ES PRIMERO.
Gral. Brig. Ret. Samuel Lara Villa
FEDERACION DE MILITARES RETIRADOS “GRAL. FRANCISCO J. MÚGICA” A. C.
Nació el 21 de mayo de mayo de 1999 a instancias del Gral. Brig. Ret. Samuel Lara Villa entonces Diputado Federal por el Partido de la Revolución Democrática en la LVII Legislatura, atendiendo las demandas de los compañeros en esa misma situación militar, hartos de saberse manipulados en las Asociaciones Comandadas por Generales designados por la superioridad y solventados por el Partido Revolucionario Institucional.
Nuestra FEMIRAC se sostiene con las cuotas de los compañeros cuando les es posible cubrirlas, no son obligatorias, y no aceptamos aportaciones extrañas para no adquirir compromisos. La Mesa Directiva se elige por votación libre y secreta no importando el grado jerárquico del candidato que puede ser del Ejército, de la Armada o de la Fuerza Aérea, asi como sus familiares o descendientes con el carácter de miembros honorarios. Actualmente nos reunimos en la calle de Monterrey 28, Dep. 4 esquina con Puebla ( metro Insurgentes ) a las 11:00 hs. Súmate a la acción, ejerce tu valor civil y militar no esperes a que otros lo hagan por ti.- LA PATRIA ES PRIMERO.-Teléfonos 5396 5385 y 5312 8009, Correo Electrónico: samuellaravilla@hotmail.com
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