29 de Octubre de 2007
ÍNDICE POLÍTICO
FRANCISCO RODRÍGUEZ
DURANTE DÉCADAS, HAN corrido leyendas urbanas sobre lo bien que viven los trabajadores de Petróleos Mexicanos a bordo de las plataformas marinas, de donde se extrae la mayor cantidad de crudo que el país exporta al mundo.
Que si, como marqueses, tenían a su disposición alimentos llevados a altamar directamente desde las más sofisticadas cocinas de Houston, Texas… que si ganaban como príncipes, pues además sólo trabajaban 14 días por mes… que si gozaban de muchos más privilegios que aquellos de sus compañeros que se desempeñan en tierra firme…
Y nada. Hoy esas leyendas urbanas se han perdido en el mar, junto con la vida de casi una veintena de trabajadores.
Porque la cruda realidad hoy nos enseña que muchos de ellos trabajan para empresas contratistas y no para Pemex… que estas empresas, para abultar sus ya de por sí crecidas ganancias, les pagan sueldos miserables y que ellos cobran con retrasos… que la comida es infame y, lo peor, que su seguridad prácticamente no existe
Empresas contratistas que hace unos días recibieron una reprimenda del actual director general de la paraestatal, Jesús Reyes Heroles GG, señalándolas cual responsables de muchos de los problemas que aquejan a Pemex… y a sus trabajadores.
La acusación hacia el contratismo, empero, está planteada… y nada más… No hay consecuencias.
A diferencia del padre, que combatió al contratismo el hijo nada más lo invoca.
Debe haber consecuencias hoy, tras el choque de plataformas en la sonda de Campeche.
Debe haberlas, tras la exigencia del senador Manlio Fabio Beltrones, quien anuncia que hay evidencias de que la empresa Oceanografía, vinculada a los negocios de la actual esposa del ex presidente Vicente Fox, era la encargada de verificar la calidad de las embarcaciones salvavidas que se hundieron en las dos plataformas de Pemex en Campeche.
Hay datos precisos, dijo, de que no habían pasado muchos años pruebas o verificaciones de la calidad de los servicios que prestaba.
Así es el contratismo en Pemex… Así es la corrupción… Así es como con su vida, los trabajadores pagan la cuota más alta de los negocios negros entre personajes encumbrados y empresarios sin escrúpulos. La vida de esta veintena de mexicanos debe abonarse a los muchos que en México cobra día a día la corrupción…
Y es que en este fatídico accidente que tiñe de rojo las aguas del Golfo de Campeche, están condensados todos los elementos que preconfiguran el mexicanísimo "a’i se va": se movieron las plataformas que colisionaron, sin tomar en cuenta las condiciones meteorológicas… se lanzaron al mar los trabajadores, aún a sabiendas de que el equipo de salvamento no estaba en condiciones, ni ellos tenían la capacitación para hacerlo…
Todo esto mientras Fox, Sahagún, sus hijos, los empresarios con quienes hicieron groseros negocios nada más dicen "no es cierto… no es cierto".
La muerte de esta veintena de trabajadores es la mejor oportunidad para que, hastiados de las corruptelas de los políticos y sus familias, exijamos que ahora sí esta sea la última vez que permitamos este saqueo a la Nación… ¿no lo cree usted así?
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