• Hasta febrero...
Y tanto estiraron la cuerdita, mi estimado, que claro, terminó por romperse. Termina la zarandeada semana con confusiones, traiciones, desórdenes y presiones y con un visible responsable aunque los medios de intoxicación masiva lo disimulen jugando al Tío Lolo: Felipe Calderón Hinojosa.
El inquilino de Los Pinos, my friend, es el primer culpable en la desenfrenada cadenita de todo el megadesmadre en ambas Cámaras ocasionada por el engendro Cofipe y el cochinero del ife producto de la estúpida negociación del chisguete fiscal por la reforma electoral que, además de ser un absoluto bodrio que mantiene polarizada a la clase política con la clase empresarial, demostró el marcador global de este régimen: deplorable. Zero, zap. Nulo. Next.
Fantástico el trabajo político desplegado por este Gymboree presidencial hundido mejor en el chapoteadero etílico y en el interés del coyotaje por los grandes negocios —el caso de los manglares, prometo enterarlo, es sencillamente un espléndido botón— en lugar de comportarse a la altura de las muy complejas circunstancias nacionales.
Y claro que a este cínico coctelito hay que sumar la patética, descocada y atrevida conducta de los legisladores donde indiscutiblemente el PRI se lleva las palmas de oro en la nominación de los pasados de lanza. ¿Por qué?
Más allá del permanente chantaje hacia el PAN y su jefe, hablamos de Felipe, (qué, ¡¿hay otro?!) mientras por el otro lado andan vendiéndole a millones de incrédulos mexicanos una imagen de responsabilidad e institucionalidad, el camino rumbo al ife, con primera escala en el Cofipe, se volvió intransitable con la terquedad del padre de la novia, Manlio Fabio Beltrones, al querer imponer a Jorge Alcocer como sucesor de Luis Carlos Ugalde —a quien ahora le van a ordenar que porfa, (sorry, somos unos imbéciles y te necesitamos) posponga utilizar su pase de abordar hasta el 1 de febrero del próximo año— desencadenando los demonios azules que le dieron flit en fast track, con algunas simpatías de Los Pinos para que al sonorense no le anden contando cuentos.
Y de ahí, mi estimado, las lacritas amarillas se montaron en su macho llamado Genaro Góngora a quien, aquí se lo adelantamos primero, el artículo 98 de la Constitución le metía un ruido marca Acme en una mezcla mixta de vericuetos políticos jurídicos.
Y Góngora se convirtió en el epicentro de la revancha tricolor. Y ahora este exquisito culebrón se va hasta febrero —mes del amor y la amistad— donde los legisladores amarillos de la nueva izquierda de derecha solicitarán reponer el procedimiento para entronizar ahora a su zarandeado ministro.
Y si le parece poco el caos legislativo navideño —que desploma el estribillo esquizoide presidencial de los cacareados acuerdos— la ocurrente reforma en materia judicial ya se fue también al nabo... y sin escalas... hasta febrero.
Porque como ya les gustó ese divertido caminito de pactar (en lo oscurito) una reforma por otra, el ife y la de justicia iban juntas con pegadas.
Y como ya se cerró el periodo ordinario de concertacesiones, my friend, nuestros diputados y senadores ya se van de vacaciones. No sin antes (su $$$) los primeros hacérsela cansada a la agobiada Ruth —a quien le urge un buen makeover— que se amargaba pidiendo orden ante el roñoso desorden. Súmele el malicioso ingrediente de que en Xicoténcatl con los amenos cambios —al cierre de este espacio— exigidos por los amarillos en las comas y puntos de algunas cuestiones en la reforma en materia judicial, el paquetón tiene altas posibilidades de regresar a San Lázaro para ser utilizado como ¡adivinó usted! ficha de cambio.
Así que resumiendo, mi querido lector, Felipe pasará una amarga navidad porque (poor thing) se quedó sin reformas. Nada que celebrar con millonaria pirotecnia mediática de que su gobierno llega a fin de año sobre ruedas (ponchadas).
Y no estaría mal que porfa sus asesores del alocado Gymboree le soliciten prudencia (por no decir le callen la boca y como X-mas wish de pasadita al histérico secretario Lozano Alarcón que, curiosamente, cada mes regala estridencias hormonales) ante ese peligroso sonsonete de que la economía mexicana está blindada ante cualquier riesgo porque eso es una absoluta mentira.
Muchos analistas pronostican turbulencias financieras internacionales que golpearán a México donde, además, el primer trimestre se antoja delicado así que... lets fasten our seatbelts instead of believing razzle-dazzle bullshit.
En fin, my friend, vaya semanita... ¡Adiós!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario