Me pidio Sam que les subiera de inmediato el siguiente audio, es referente a la postura de Revoluciones en torno al informe del PLL para el día de mañana.
Sam García
Damas y caballeros, estoy muy preocupado porque nuevamente los medios masivos de comunicación han logrado envolver a la población en el tema del primer informe de gobierno del supuesto presidente constitucional Felipe Calderón. Se genera mucho ruido en torno a tal acontecimiento pero hay una terrible perdida de interés social e individual en México, lo cual impide mejorar las condiciones de vida de nuestra gente, nos estamos estancando en los sucesos del ámbito político del país existiendo otras cosas igual o más relevantes que atender. No solamente de política se constituye una sociedad, menos en México, donde millones de nosotros somos testigos que en lo menos que debemos confiar y creer es en la opinión de los supuestos servidores públicos y políticos, que lo único que saben hacer es servirse del poder, arrebatarnos lo nuestro y defender los intereses de unos cuantos. En nuestra patria también hay cultura, arte, ciencia, tecnología, religión y varias cosas más de las cuales poco o nada se habla dentro y fuera de los medios.
Creemos firmemente que el próximo sábado -independientemente de cual sea la manera en que el usurpador Calderón rinda su informe- el show mediático no le va quitar el hambre a los millones de mexicanos que viven en la miseria. Dicho informe no va a liberar de la cárcel a mujeres y hombres presos injustamente, tampoco va devolverte el dinero que los bancos y/o empresas te han arrebatado injustamente, en complicidad con las autoridades judiciales y legislativas corruptas. El que un sujeto que aparenta ser “presidente de los mexicanos” ponga en un papel frases bonitas que digan “lo que ha hecho” y se para ante un micrófono, no le devuelve a México la dignidad que ha venido perdiendo, no de hoy, sino desde hace décadas.
Les invito a que desde nuestros círculos de convivencia inmediatos, entre amigos, conocidos y familiares, comencemos de verdad el cambio profundo que requiere México. Debemos detener los constantes atropellos de la clase política y revertir el efecto de los medios de comunicación, quienes nos han mantenido entretenidos y lejos de la realidad de la nación para no afectar los planes de los potentados. Usted y yo desde la comodidad del hogar hemos estado acostumbrados a encender el televisor y contaminarnos la mente día y noche, pero ya es momento de decir basta y ahora nutrir nuestra familia y grupos de estudio-trabajo con pláticas y prácticas constructivas que sacudan nuestra conciencia.
Es muy sencilla la tarea que podemos empezar a hacer: debemos valorar en todo momento si nuestras autoridades inmediatas cumplen o no con su función, si pueden o no siquiera atreverse a pensar en rendir un informe, si pueden seguir o no gozando del salario que les pagamos con nuestros impuestos. Tenemos que empezar a reclamar como ciudadanía que las autoridades que aparentemente elegimos funcionen bien. No es una propuesta utópica, dado que si es una realidad cada saqueo y despojo en millones de hogares, también es válido, viable y real que nos organicemos para revertir la situación, rescatando así a nuestra sociedad. Todo está en la medida de que nos lo propongamos y sepamos delegar responsabilidades para funcionar verdaderamente como una nación.
México no puede ser México teniendo a la mayoría de su gente olvidada, marginada y constantemente agraviada. Nuestra hora es hoy, no mañana; nuestra lucha no está solo en un gran político, ni en un carismático, ni un partido u organización alguna en particular; este esfuerzo por cambiar es por y para nosotros mismos. Esa clase política corrupta jamás va a entrar a tu hogar a ver que es lo que te hace falta, ni los payasos que el sábado montarán el show del informe presidencial te van a ayudar a mejorar tus condiciones de vida, solo tú y Dios pueden ser el factor de cambio genuino para esta patria. Sería muy distinto que rindieran sus informes y montarán todos sus espectáculos cara a cara frente al pueblo de México en plazas públicas, municipio a municipio, pero su único México y el que los legitima son los medios de comunicación.
Por lo anterior y por muchas razones más, es que estamos convocando a la ciudadanía a despertar del largo letargo que ha afectado a generaciones enteras en el país. No queremos que se siga siguiendo con el mismo modelo de gobierno y por lo tanto repudiamos todo acto que se vaya a presentar el 1 de septiembre en el Congreso, les invitamos generar pláticas, sanos debates y discusiones a partir de este momento, que impulsen a la gente a conocer a sus autoridades locales y saber como están actuando. Vayamos hacia la formación de grupos de análisis y de trabajo ciudadano que nos permitan más adelante converger a todos en un movimiento ciudadano de escala nacional, el cual siendo mayoría exija la destitución de los malos y falsos servidores públicos.
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