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Informó que pudo constatar personalmente ese ánimo de los Cinco en visitas realizadas como abogado defensor y agregó que tienen principios sólidos, defienden a su país y creen en la Revolución, que es –agregó- lo que contribuye a sostener su fuerza.
El prestigioso jurista comparó a Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y René González, que cumplen largas condenas en cárceles en distintas regiones de Estados Unidos, con la estoica resistencia del líder sudafricano Nelson Mandela.
Al exponer el caso ante juristas, diplomáticos, académicos y universitarios en el Aula Magna de la Universidad Central, sede del Centro de Estudios de los Derechos Humanos, que preside el ex juez Juan Guzmán, llamó a redoblar la solidaridad internacional, pues “si el mundo esta observando, entonces, la justicia será aplicada adecuadamente”, opinó.
Weinglass comenzó su aplaudida clase magistral pidiendo perdón por la participación de su país en el golpe militar de 1973 contra el presidente Salvador Allende y la posterior violación de los derechos humanos y dijo que todo ciudadano norteamericano que visita Chile debería hacer lo mismo.
Reveló que poco después de ese golpe vino por primera vez a Chile para ayudar a buscar al economista Jaime Barrios, asesor económico de Allende, detenido-desaparecido hasta hoy.
Entre los asistentes a la conferencia, varios dirigentes sociales y de organizaciones defensoras de los derechos humanos y de los Mapuches, así como ex presos políticos, agradecieron a Weinglass sus palabras y reiteraron su solidaridad con los cinco cubanos.
Invitado por Guzmán, conocido por haber procesado al dictador Augusto Pinochet y por otros casos de derechos humanos y de defensa de las comunidades indígenas, y por la Coordinadora de Solidaridad con Cuba, Weinglass brindó una pormenorizada información acerca de la detención, el juicio y la prisión de los patriotas cubanos.
También se refirió a la marcha del prolongado y complejo proceso judicial, actualmente a la espera de una decisión de la corte de apelaciones, pero insistió en la utilidad de que el tema sea más ampliamente divulgado en Chile y en el mundo.
Al presentar a Weinglass, Guzmán -quien asistió el año pasado como observador a una vista oral del juicio en Atlanta y, a su regreso, denunció numerosas arbitrariedades judiciales- sostuvo que el caso de los cinco cubanos constituye una “mancha para la justicia de Estados Unidos”.
A su vez, el embajador de Cuba en Chile, Giraldo Mazola, resaltó que Weinglass ha tenido que luchar “contra un sistema judicial parcializado y un poder mediático comprometido”.
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