En vísperas de un referéndum este domingo venidero sobre propuestas que enmendarían la constitución venezolana, una encuesta realizada entre el 21 y el 27 de noviembre revela una intención de voto favorable al presidente Hugo Chávez.
La encuesta, con un margen de error de 2,16% y nivel de confianza de 95%, fue llevada a cabo por Consultores 30.11, empresa que en el pasado ha anticipado resultados electorales con precisión.
La encuesta no se limitó a plantear una simple opción entre el Sí y el No; también auscultó el sentir de la población en relación a temas tales como su opinión general del gobierno y de la oposición, su percepción de cómo transitan las cosas en el país, y sus principales preocupaciones.
Los encuestados afirman que de seguro o probablemente participarán en el voto en un porcentaje de 83%. Un 56% se considera informados o bien informados sobre las opciones que tendrán el domingo, aunque entre los que de seguro sí votarán el número asciende a 62%.
Entre los electores, de seguro no participará en el voto 20,3%, y 14,7% no ha decidido. El resto se divide en 38,2% a favor de las enmiendas y 26,8% en contra. Tocante a qué resultados esperan, 60,4% opina que ganará el Sí, y 32,2% dice que el No.
Entre los que de seguro sí participarán, la diferencia en preferencia de voto es mucho más marcada: 55,5% definitivamente votará por el Sí, y 39,9% por el No.
Es decir, que si la votación se limitara a los que ahora aseguran que tomarán parte, el Sí (a favor de Chávez) ganaría en mayoría, por más de 15 puntos.
La situación no queda tan clara respecto a los otros posibles votantes: entre ellos existe un empate técnico (31.2% por el Sí, 30,5% por el No), mientras que 38,3% no ha decidido su voto o de seguro no participará.
En breve, el grado de participación en la consulta electoral decidiría el diferendo entre el Sí y el No, con un probable resultado favorable a Chávez en todo caso.
En otros temas, la encuesta revela que la preocupación mayor de la población, con 55%, es la inseguridad, ocupando el desempleo un distante segundo lugar, con 11%. El gobierno es calificado como el problema más grave del país por sólo 5,6% de los entrevistados.
En 2006, Chávez recibía una opinión positiva en total por parte de un 53%, cifra que ha mermado a casi 50%. Sin embargo, el porcentaje que calificó la gestión oficial como "regular" ascendió de 10% a 19%, mientras que la opinión negativa bajó de 37% a 31,4%.
En paralelo, la encuesta encontró una identificación política dividida: En 2006, un 42% se consideraba chavista, proporción que ha bajado en el 2007 a 36,2%. La oposición también perdió adeptos, cayendo de 30% a 24%. Ganaron proporcionalmente los auto-identificados como "moderados", de 16% a 22%, y los que profesan no alinearse ni con un lado ni con el otro, de 11% a casi 17%.
El país, según los resultados de la encuesta, ha visto un descenso en la afiliación pro o contra Chávez, siendo la caída mayor para la oposición, mientras que más personas se sitúan ahora en posiciones "no alineadas." La pluralidad, con todo, sigue siendo chavista, y la preferencia de voto para los comicios de fin de semana se sitúa a favor del presidente.
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