Cuando se inicie el lunes aquí, el concurso Miss Universo no contará con Miss Suecia, una rubia escultural cuyo país es uno de los pocos en haber ganado en tres ocasiones.
Isabel Lestapier Winqvist, de 19 años y ganadora de Miss Suecia, decidió no participar porque los suecos consideran que la competencia de Miss Universo es degradante para las mujeres y está plagada de escándalos. “Estamos recibiendo críticas por estar vinculados con Miss Universo”, dijo Panos Papadopoulos, el organizador del concurso de Miss Suecia, que eliminó la competencia de trajes de baño y permitió a las mujeres postularse como a cualquier otro empleo, tras fuertes presiones de feministas.
Otras participantes en el concurso, ahora propiedad de Donald Trump y la NBC , están retando estereotipos desde adentro. Miss Jamaica es la primera rastafaria en el concurso y la primera en lucir el cabello al estilo tradicional de esa religión. Zahra Redwood, de 25 años, dice que quiere que los jueces la vean como “una rastafaria que promueve el mensaje de paz, amor y unidad entre toda la humanidad”.
Trump dice que la organización de Miss Universo ha redefinido los concursos de belleza. “Cada año nuestra audiencia es mayor, gracias a las mujeres hermosas e inteligentes que participan en nuestras competencias”, dijo.
Pero la competencia de Miss Universo sigue siendo juzgada sobre la base de la entrevista y las competencias de traje de baño y vestido de noche, continuando una tradición iniciada hace 50 años por una disputa.
La compañía de ropas Pacific Mills creó Miss USA y Miss Universo luego que la Miss America (Estados Unidos) de 1951, Yolande Betbeze, se negase a posar en traje de baño.
Miss Universo es considerada rival de Miss América, que ofrece becas de estudios y valora la competencia de talentos más que su competencia en traje de baño. Incluso algunos vestuarios de las concursantes de este año en Miss Universo están causando alboroto.
Miss México, Rosa María Ojeda, se vio obligada a cambiar su vestido a uno con motivos de frutas y vegetales luego que muchos mexicanos expresasen indignación por el cinturón cargado de balas y las imágenes de cadáveres colgados y pelotones de fusilamiento en el diseño original de su falda, que aludía a la guerra de los Cristeros, una sangrienta rebelión católica de los años 20.
Miss Jamaica lució una camiseta con la imagen de Bob Marley para honrar la cultura de su país y Miss Canadá, Inga Skaya, vistió un traje de hockey sobre hielo. Papadopoulos, cuya compañía compró los derechos a Miss Suecia en el 2004, dice que el concurso de Trump no se ajusta a la nueva imagen de la competencia sueca. “La modernización de la competencia internacional ha sido significativamente más lenta que en el concurso sueco, aunque vemos señales de cambio en el horizonte”, dice Papadopoulos (Con información de AP)
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