PARA ENTENDER LA NOTICIA
Por Benjamín Castro
A vender sus "servicios"
Todo lo que hacen "los chuchos" dentro del Partido de la Revolución Democrática (PRD) forma parte de la estrategia de Felipe Calderón para sacar adelante sus reformas. A su vez, el único propósito del gobierno de Calderón como gobierno es precisamente ese, el de llevar a cabo las llamadas "reformas estructurales". Eso lo reiteró recientemente el ex presidente Carlos Salinas de Gortari ---un aliado de Calderón—en sus declaraciones revestidas con su habitual cinismo y sus signos inocultables de demencia. De hecho las reformas son el centro de la vida política del país y dentro de ellas la reforma energética significa todo para el futuro de México porque el petróleo ha sido también el eje de la historia moderna de México desde antes de 1910, desde finales del porfiriato cuando menos.
Así que es en ese contexto que debe ubicarse el uso que esta haciendo Calderón del PRD ahora en manos de Jesús Ortega, Ruth Zavaleta, Guadalupe Acosta etc., con la asesoría de Manlio Fabio Beltrones y otros. En primer lugar la misma división del partido es utilizada contra López Obrador para desacreditarlo. Cada pronunciamiento de Ortega o de cualquiera de los de su corriente es utilizada por los analistas e ideólogos al servicio de Calderón para decir que López Obrador y su "radicalismo" es el que ha causado la crisis dentro del PRD. Al mismo tiempo, quieren que Jesús Ortega tome el control de ese partido para imponer la línea dizque "moderada", que no es otra cosa que la colaboración del PRD en los planes de Calderón incluyendo la reforma energética para privatizar la totalidad de las operaciones de PEMEX. De hecho la estrategia de Ortega, Rene Arce, Jesús Zambrano y otros lideres de la "Nueva Izquierda" es precisamente la de vender a Calderón y a lo que llaman "los poderes fácticos", la idea de que ellos pueden detener a López Obrador y quitarle el partido. A Calderón y sus controladores de la oligarquía nacional e internacional, les interesa sobre manera quitarle las capacidades logísticas y los recursos al tabasqueño. Quitarle el apoyo del PRD como institución y sus recursos es un objetivo muy acariciado por Calderón y sus amos. Jesús Ortega va a tratar de usar esa oferta para hacerse de otras ganancias políticas como gobernaturas, senadurías, diputaciones, alcaldías etc. y de esa manera ir creciendo y acumulando mas poder mientras le venden a Calderón el apoyo para las reformas estructurales del FMI.
Es poco probable que se pueda detener a los chuchos y evitar que se apoderen del PRD. De hecho toda la vida electoral del país, tanto en las elecciones federales como en las locales, esta en manos de Calderón y el aparato de fraude que comanda Beltrones y los gobernadores priistas. Ya no habrá ninguna resultado electoral que no este bajo control y no sea negociado. Por lo mismo es poco probable que la dirigencia del PRD pueda ser ganada "democráticamente" por nadie. Por lo tanto, bajo el control de Calderón y los chuchos el PRD se convertirá muy pronto en la imagen de aquellas prostitutas en la avenida San Juan de Leerán de la Ciudad de México –hoy Eje central—exhibían sus joyas y sus vestidos de lujo para atraer más clientes. Utilizarán los frutos de su corrupción para conseguir más negocios. . Lo malo es que esa prostituta se exhibirá en las calles precisamente en los tiempos en que el colapso del sistema financiero global y la depresión de la economía habrán de expresarse en la escasez de alimentos y el hambre de millones en México y el mundo. Frente a un proceso de masas causado por el derrumbe del sistema globalista la población mexicana no verá en el PRD a un organización tipo partido leninista sino a una prostituta buscando clientes y ofreciendo una "posición moderada" para atraer clientela.
El autor es miembro del Movimiento Internacional del economista Lyond H. LaRouche.
Por Benjamín Castro
A vender sus "servicios"
Todo lo que hacen "los chuchos" dentro del Partido de la Revolución Democrática (PRD) forma parte de la estrategia de Felipe Calderón para sacar adelante sus reformas. A su vez, el único propósito del gobierno de Calderón como gobierno es precisamente ese, el de llevar a cabo las llamadas "reformas estructurales". Eso lo reiteró recientemente el ex presidente Carlos Salinas de Gortari ---un aliado de Calderón—en sus declaraciones revestidas con su habitual cinismo y sus signos inocultables de demencia. De hecho las reformas son el centro de la vida política del país y dentro de ellas la reforma energética significa todo para el futuro de México porque el petróleo ha sido también el eje de la historia moderna de México desde antes de 1910, desde finales del porfiriato cuando menos.
Así que es en ese contexto que debe ubicarse el uso que esta haciendo Calderón del PRD ahora en manos de Jesús Ortega, Ruth Zavaleta, Guadalupe Acosta etc., con la asesoría de Manlio Fabio Beltrones y otros. En primer lugar la misma división del partido es utilizada contra López Obrador para desacreditarlo. Cada pronunciamiento de Ortega o de cualquiera de los de su corriente es utilizada por los analistas e ideólogos al servicio de Calderón para decir que López Obrador y su "radicalismo" es el que ha causado la crisis dentro del PRD. Al mismo tiempo, quieren que Jesús Ortega tome el control de ese partido para imponer la línea dizque "moderada", que no es otra cosa que la colaboración del PRD en los planes de Calderón incluyendo la reforma energética para privatizar la totalidad de las operaciones de PEMEX. De hecho la estrategia de Ortega, Rene Arce, Jesús Zambrano y otros lideres de la "Nueva Izquierda" es precisamente la de vender a Calderón y a lo que llaman "los poderes fácticos", la idea de que ellos pueden detener a López Obrador y quitarle el partido. A Calderón y sus controladores de la oligarquía nacional e internacional, les interesa sobre manera quitarle las capacidades logísticas y los recursos al tabasqueño. Quitarle el apoyo del PRD como institución y sus recursos es un objetivo muy acariciado por Calderón y sus amos. Jesús Ortega va a tratar de usar esa oferta para hacerse de otras ganancias políticas como gobernaturas, senadurías, diputaciones, alcaldías etc. y de esa manera ir creciendo y acumulando mas poder mientras le venden a Calderón el apoyo para las reformas estructurales del FMI.
Es poco probable que se pueda detener a los chuchos y evitar que se apoderen del PRD. De hecho toda la vida electoral del país, tanto en las elecciones federales como en las locales, esta en manos de Calderón y el aparato de fraude que comanda Beltrones y los gobernadores priistas. Ya no habrá ninguna resultado electoral que no este bajo control y no sea negociado. Por lo mismo es poco probable que la dirigencia del PRD pueda ser ganada "democráticamente" por nadie. Por lo tanto, bajo el control de Calderón y los chuchos el PRD se convertirá muy pronto en la imagen de aquellas prostitutas en la avenida San Juan de Leerán de la Ciudad de México –hoy Eje central—exhibían sus joyas y sus vestidos de lujo para atraer más clientes. Utilizarán los frutos de su corrupción para conseguir más negocios. . Lo malo es que esa prostituta se exhibirá en las calles precisamente en los tiempos en que el colapso del sistema financiero global y la depresión de la economía habrán de expresarse en la escasez de alimentos y el hambre de millones en México y el mundo. Frente a un proceso de masas causado por el derrumbe del sistema globalista la población mexicana no verá en el PRD a un organización tipo partido leninista sino a una prostituta buscando clientes y ofreciendo una "posición moderada" para atraer clientela.
El autor es miembro del Movimiento Internacional del economista Lyond H. LaRouche.
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