por Leonardo Cruz
Eran las 8:30 a.m. cuando comenzó la marcha, en la ciudad de México no es común ver movilizaciones en este horario, sin embargo en Oaxaca los contingentes ya habían llegado en su mayoría y estaban listos para comenzar una más de las kilométricas marchas que son costumbre en esas latitudes. El sábado se conmemoraba el aniversario de una de las más cruentas masacres (sí: cuando los policías persiguen en camionetas a la manifestación para atropellar a los participantes, cuando se dispara contra gente desarmada, cuando se propinan sendas golpizas a mujeres embarazadas y ancianos, no hay nombre que le quede mejor) que se haya vivido en el estado en los últimos años.
El ambiente no era festivo, sino que en general, se podría decir más bien, combativo y de reflexión. En este contexto, compañeros de la Tendencia Marxista Militante participamos en las movilizaciones como siempre lo hacemos: ofreciendo a los trabajadores una alternativa y una perspectiva de lucha por el socialismo. Nuestra intervención corrió a cargo de tres compañeros, que llevaban una batería de 120 periódicos atrasados (pues los del mes de noviembre se agotaron dramáticamente desde el 18 de noviembre, en nuestra intervención en la CND). Las perspectivas y el balance de nuestros números anteriores es totalmente vigente al día de hoy y así lo explicaron los compañeros de la TMM a lo largo de la marcha en una serie de breves participaciones en las que se dirigían a los asistentes.
El periódico de agosto por ejemplo, tiene como portada el títiulo “31 de agosto: Impulsemos la huelga nacional”. Esta consigna se vinculaba con la batalla que se está dando contra las contrarreformas a la ley del ISSSTE. Para el magisterio que asistió a la marcha, ésta era una consigna clara y diáfana como agua de manantial. El motivo de la marcha era, fundamentalmente, mostrar el repudio, el rechazo a la represión y la disposición a ya no permitirla. Explicar que la única forma en que no habría represión sería tumbando a URO, lo cual estaba vinculado a la caída del espurio, de la cual se habla en varios artículos pasados, igualmente era una consigna bien recibida.
Los compañeros que asistieron a la marcha y compraron nuestro periódico no se quejaron porque fueran números pasados, sabían que las ideas del mismo eran vigentes, pues los compañeros que los distribuimos lo explicamos de manera breve, pero concisa. Nadie se quejó tampoco porque nuestro periódico tuviera precio y no fuera de cooperación voluntaria o regalado. Los trabajadores saben que todo lo que vale la pena tiene un costo (no necesariamente económico, por supuesto) y este informe no es para explicar por qué el nuestro lo tiene1. Esa es la fuerza de las ideas: ningún periódico burgués puede colocar números anteriores si no es para el reciclaje.
La comisión también asistió a la segunda asamblea de la FNCR, pero esa es otra historia. Baste decir para el autor que en el frente, el FPR no nos va a convencer de la revolución en dos etapas ni nosotros queremos convencerlos de la revolución permanente.
Al final, se vendieron más de 100 periódicos en la marcha, documentos de fondo de lucha y dos compañeros se mostraron interesados en formar parte de la organización (con quienes por supuesto, mantendremos el contacto).
¡Para acabar con la represión, URO y FeCal han de caer! ¡En Oaxaca y el mundo entero ni un paso atrás contra el capitalismo!
¡En Oaxaca y el mundo entero, únete a la Corriente Marxista Internacional y lucha por el socialismo!
1 Pero si el lector está interesado en saber más acerca de la prensa obrera, no dude en consultar nuestra sección al respecto picando aquí
Eran las 8:30 a.m. cuando comenzó la marcha, en la ciudad de México no es común ver movilizaciones en este horario, sin embargo en Oaxaca los contingentes ya habían llegado en su mayoría y estaban listos para comenzar una más de las kilométricas marchas que son costumbre en esas latitudes. El sábado se conmemoraba el aniversario de una de las más cruentas masacres (sí: cuando los policías persiguen en camionetas a la manifestación para atropellar a los participantes, cuando se dispara contra gente desarmada, cuando se propinan sendas golpizas a mujeres embarazadas y ancianos, no hay nombre que le quede mejor) que se haya vivido en el estado en los últimos años.
El ambiente no era festivo, sino que en general, se podría decir más bien, combativo y de reflexión. En este contexto, compañeros de la Tendencia Marxista Militante participamos en las movilizaciones como siempre lo hacemos: ofreciendo a los trabajadores una alternativa y una perspectiva de lucha por el socialismo. Nuestra intervención corrió a cargo de tres compañeros, que llevaban una batería de 120 periódicos atrasados (pues los del mes de noviembre se agotaron dramáticamente desde el 18 de noviembre, en nuestra intervención en la CND). Las perspectivas y el balance de nuestros números anteriores es totalmente vigente al día de hoy y así lo explicaron los compañeros de la TMM a lo largo de la marcha en una serie de breves participaciones en las que se dirigían a los asistentes.
El periódico de agosto por ejemplo, tiene como portada el títiulo “31 de agosto: Impulsemos la huelga nacional”. Esta consigna se vinculaba con la batalla que se está dando contra las contrarreformas a la ley del ISSSTE. Para el magisterio que asistió a la marcha, ésta era una consigna clara y diáfana como agua de manantial. El motivo de la marcha era, fundamentalmente, mostrar el repudio, el rechazo a la represión y la disposición a ya no permitirla. Explicar que la única forma en que no habría represión sería tumbando a URO, lo cual estaba vinculado a la caída del espurio, de la cual se habla en varios artículos pasados, igualmente era una consigna bien recibida.
Los compañeros que asistieron a la marcha y compraron nuestro periódico no se quejaron porque fueran números pasados, sabían que las ideas del mismo eran vigentes, pues los compañeros que los distribuimos lo explicamos de manera breve, pero concisa. Nadie se quejó tampoco porque nuestro periódico tuviera precio y no fuera de cooperación voluntaria o regalado. Los trabajadores saben que todo lo que vale la pena tiene un costo (no necesariamente económico, por supuesto) y este informe no es para explicar por qué el nuestro lo tiene1. Esa es la fuerza de las ideas: ningún periódico burgués puede colocar números anteriores si no es para el reciclaje.
La comisión también asistió a la segunda asamblea de la FNCR, pero esa es otra historia. Baste decir para el autor que en el frente, el FPR no nos va a convencer de la revolución en dos etapas ni nosotros queremos convencerlos de la revolución permanente.
Al final, se vendieron más de 100 periódicos en la marcha, documentos de fondo de lucha y dos compañeros se mostraron interesados en formar parte de la organización (con quienes por supuesto, mantendremos el contacto).
¡Para acabar con la represión, URO y FeCal han de caer! ¡En Oaxaca y el mundo entero ni un paso atrás contra el capitalismo!
¡En Oaxaca y el mundo entero, únete a la Corriente Marxista Internacional y lucha por el socialismo!
1 Pero si el lector está interesado en saber más acerca de la prensa obrera, no dude en consultar nuestra sección al respecto picando aquí
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