MONREAL Y EL PRESIDENCIALISMO

26 de Septiembre de 2007

ÍNDICE POLÍTICO

FRANCISCO RODRÍGUEZ

"Espero que esta denuncia (contra Vicente Fox) y las otras que hemos interpuesto no se extravíen de esta delegación metropolitana(de la PGR) tal y como sucedió con algunos documentos del sindicato minero…"

Ricardo Monreal,

Abril de 2007

PRIMERO LE DIO la batalla a Ernesto Zedillo… y le ganó.

Con Vicente Fox en Los Pinos mantuvo serias diferencias, sobre todo por la situación de indefensión que guardan los mexicanos que han sido expulsados del país y ahora viven en el extranjero.

Va de nueva cuenta contra el guanajuatense a quien, en abril de este año, ya denunció penalmente por su injerencia en la vida interna del sindicato minero.

Ricardo Monreal Ávila lleva ya más de diez años luchando denodadamente en contra del presidencialismo exacerbado. Ese presidencialismo que en el pasado, convertía al temporal portador de la banda presidencial en dueño de vida y de honras, lo que lo convertía en la instancia final y definitiva para cualquier carrera política. Monreal se enfrentó a Zedillo, sí, quien no le favoreció con la candidatura del PRI que, por su popularidad y arrastre, lo convertiría casi en automático en gobernador de Zacatecas. Mudó Monreal sus legítimas aspiraciones al PRD y dio a este partido el triunfo electoral que meses antes ni siquiera imaginaba.

Zedillo pretendió cobrar venganza ante tamaña indisciplina. Y ya gobernador Monreal, le escamoteó recursos necesarios para las obras públicas que la sociedad zacatecana reclamaba. Y Monreal inició una marcha, desde la capital de su entidad hasta el arrogante altiplano, para exigir lo que en justicia le correspondía: recursos para construir una carretera en la entidad. Volvió a vencer a Zedillo, haciendo válida la adhesión de Zacatecas al Pacto Federal.

Con Zedillo la relación no fue mejor. Pero tampoco peor. Conocedor profundo del Derecho Constitucional –del cual posee un doctorado— Monreal nunca permitió al guanajuatense que menoscabara o, menos aún, que violara la relación que debe guardar la Federación con los estados adherentes.

Y es en busca de que prevalezca el orden constitucional y eso que en los discursos se llama Estado de Derecho que, otra vez, Monreal endereza una denuncia penal en contra de Vicente Fox.

Porque, como pocas veces antes, Fox ejerció el presidencialismo exacerbado. Y porque, todo lo indica, uso los privilegios, la influencia y el poder del encargo que le dieron la mayoría de los mexicanos en el 2000, para su provecho personal y el de la larga parentela propia y la que Marta Sahagún le endilgara.

Monreal no es ingenuo. Sabe que aún y cuando la denuncia está presentada, que avance, se archive o incluso que se pierda, depende del jefe del ministerio público federal: el señor Felipe Calderón.

Y la duda se mantiene. ¿Querrá el señor Calderón actuar conforme a sus obligaciones legales? ¿Podrá?

Porque no actuar, soslayar sus obligaciones, también es una muestra del presidencialismo exacerbado, ¿no cree usted?

*** Cometario del Sam *** Buen dato de la nota del día de hoy del buen FR, yo siento que en el enfoque que le da al comportamiento o reacción del señor Calderón habré una puerta para que tuviera cierta aceptación entre la ciudadanía, pero siendo más exigentes y realistas el hecho de que no es solo Fox sino una numerosa cantidad de la clase política la que debe rendir cuentas, vemos prácticamente imposible que el régimen solito se empiece a acorralar impartiendo “justicia” para algunos casos que en lo mediático resultarían productivos... ¿cambiaría de fondo el país juzgando a Fox o ex presidentes del pri? Lo dudo, pues un gobierno genuino, de la gente sería el único capaz de hacer justicia, el régimen simulador solo sirve para eso: para simular.