Texcoco, México. (Texcoco Mass Media).-"La escasez de agua potable se agudiza cada día más en nuestro planeta, sin embargo esto se podría reducir significativamente, en principio, con proyectos a pequeña escala, si fábricas, universidades y empresas invirtieran en sistemas de captación de agua de lluvia, labor en la que las autoridades Municipales colaborarían aportando la tecnología adecuada y elaborando proyectos, los cuales se llevarían a cabo en las diferentes comunidades solicitando la participación de los habitantes de éstas, quienes aportarían la mano de obra en la construcción de canales y cisternas para la captación y aprovechamiento del agua de lluvia para su uso como agua potable".
Lo anterior fue planteado por el ingeniero Manuel Anaya Garduño, coordinador del Centro Internacional de Demostración y Capacitación en Aprovechamiento de Agua de Lluvia (CIDECALLI) del Colegio de Postgraduados.
Por su parte el investigador del Centro Interamericano de Recursos del Agua en el Estado de México (CIRA) Carlos Díaz Delgado, dio a conocer que el consumo de agua por habitante, en promedio, es de 250 litros por día, lo cual se refleja el uso irracional del agua. "En esta entidad los recursos son una variable crítica para el desarrollo, y urge adquirir una verdadera cultura para el cuidado y uso racional del agua, ya que este vital líquido es cada vez más escaso debido a la explosión demográfica".
Ya hay captación de agua de lluvia en el Estado de México
Este proyecto de captación ya se lleva a cabo en nuestra entidad estatal, en una comunidad Mazahua del municipio de San Felipe del Progreso, así como en los Estados de Michoacán, Guanajuato y algunas entidades de nuestro país hermano, la República de Guatemala. Hay en nuestro país comunidades muy apartadas de escasos habitantes, y a los gobiernos municipales, les es costoso otorgar el servicio de agua entubada.
"Texcoco tiene grandes almacenes, tiendas hasta de diez mil metros cuadrados de techado y es impresionante ver cómo, en los meses de julio y agosto, los caudales de agua inundan las calles".
"Sería eficaz que el municipio estableciera una norma rígida y legislativa para que todos los almacenes y grandes fábricas captaran agua de lluvia", comentó el ingeniero Anaya Garduño. El sistema propuesto está diseñado para almacenar agua de lluvia durante seis meses y determina cuánto líquido debe capturarse para que dure 12 meses.
Se contempla que pase por un tratamiento que evite el crecimiento de microorganismos. Las primeras lluvias de la temporada se aprovechan para lavar techos y canales, y para finales de octubre se capta el total del agua; cuando termina la temporada se cuenta con la suficiente agua para el siguiente medio año. "Es urgente que la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) ponga atención a este proyecto, lo que hasta la fecha no ha hecho, seguramente por falta de comunicación", concluyó Anaya Garduño.
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