Sin duda alguna los jóvenes somos quienes más hemos visto atacados nuestros derechos básicos, ya sea educación, salud, vivienda, etc. El año 2007 cerró con un dato muy duro: siete de cada diez desempleados son jóvenes de entre 14 y 34 años de edad. A la falta de empleo se le suma el hecho de que incluso con estudios es muy difícil obtener empleo, hoy día un tercio de los desempleados son personas con bachillerato o licenciatura, es decir que bajo las condiciones actuales no existe ninguna garantía para evitar el padecimiento del desempleo.
De ello se deriva que el 31.5% del total de los ocupados en el sector informal de la economía tienen entre 14 y 29 años de edad. Otra de las “alternativas” que se les ofrece a los jóvenes es la migración hacia Estados Unidos, 225 mil jóvenes preparados emigran año con año. La propaganda de Calderón afirma que en materia de empleo han dado grandes avances, estas cifras demuestran claramente que no es de esa forma, la realidad es que cada día las oportunidades para mejorar las condiciones de vida de la juventud son más escasas.
Minisalario
No sólo se trata de desempleo, otro factor que afecta a la juventud son los bajos salarios, el dato más inmediato sobre esto es el incremento al salario mínimo que se aprobó para este 2008: 2 pesos diarios!!! Es decir, lo suficiente para un boleto del metro y menos del precio de un viaje en pesero. Si lo comparamos con algunos alimentos vemos que el “incremento apenas alcanza para comprar 180 gramos de frijol o 28 gramos de carne de res y ni siquiera un kilo de tortillas se puede comprar. Esa ha sido la constante, incrementos salariales de hambre, de hecho durante el gobierno de Fox el salario mínimo se incrementó sólo en 11 pesos. Esta política de contención salarial es la que ha prevalecido durante décadas, y que al momento ha llevado a la clase trabajadora y a la juventud a una situación insostenible, 67 % de los trabajadores ganan menos de dos salarios mínimos, una situación realmente insostenible. En contraparte el salario de Calderón es exorbitante aproximadamente 6 mil pesos diarios, en lo que a percepciones legales se refiere, pero a ello hay que sumarle todas las corruptelas de las que se beneficia directamente.
Precariedad
En la vida cotidiana la juventud ha sentido el golpeteo derivado de la política de la derecha en el poder. Hoy día tenemos que soportar la falta de empleo, los bajos salarios, los precios exorbitantes y además de ello otro tema severo: la precariedad laboral. Según cifras oficiales 63.14 % de los trabajadores no tienen ninguna prestación. Es decir que no cuentan con derecho a jubilación, servicio médico, prima de vacaciones, prima de antigüedad, vales de despensa y otras. Estas prestaciones para los empresarios significan un egreso que atenta contra sus privilegios y las ha borrado prácticamente para todos los trabajadores. Incluso las jornadas laborales que por ley deben ser máximo de 8 horas diarias se han incrementado a 10 o 12 horas por día. Bajo esta política es como ellos han mantenido sus altas ganancias, claro a costa del sufrimiento de la juventud.
Superprecios
En el 2007 el precio de la tortilla logró topes históricos, y en general la canasta básica llegó a precios increíbles. Sólo en el año pasado la canasta básica se incrementó un 45%, algunos estudios afirman que para adquirirla ganando un salario mínimo “tendríamos que laborar 48 horas diarias, sólo para cubrir nuestras necesidades elementales”. Así un trabajador puede llegar a ganar durante dos días lo suficiente para sobrevivir uno sólo, pero no para mantener a su familia ni para pagar actividades recreativas o de formación académica o de otro tipo, dos días laborados y ganas para pagar apenas un trozo de pan.
¿Y qué sigue?
Si hasta el momento ya los jóvenes hemos tenido que soportar una larga lista de ataques a nuestros derechos habrá que ver lo que se está planeando en las filas del gobierno Calderonista. En los últimos días el gasolinazo ha incrementado los precios de productos básicos hasta en un 300%, por otra parte se habla ya de la reforma laboral que por un lado tratará de hacer legal los robos que ya de por si se hace y tratarán se sumarle otros como por ejemplo, las contrataciones “a prueba”, es decir, harán legal el despido sin compromiso alguno por parte de los patrones. En el terreno de la seguridad social, el “seguro popular” ha venido sustituyendo al IMSS, sin embargo, en tanto el déficit de infraestructura no es posible atenderse, en la agenda de Calderón está la de seguir atacando este aspecto y ponernos en una situación aun peor.
La juventud y los trabajadores en general debemos seguir organizándonos y movilizándonos, a lo interno de nuestros sindicatos debemos formas comités de debate y acción que analicen y planifiquen acciones en contra de los ataques de la derecha. Sólo así estaremos en condiciones de echar abajo esta miserable realidad.
(Fuente: Militante)
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