Miguel Ángel GRANADOS CHAPA | CAJÓN DE SASTRE | «Reforma» 16 Mar 2007
Una sentencia emitida el lunes pasado por el juez 44 civil del Distrito Federal declaró que TV Azteca no tiene ningún derecho como accionista de Televisora del Valle de México, concesionaria del Canal 40. No lo tiene porque no es accionista, sino sólo acreedor prendario, es decir posee acciones que garanticen el pago de un adeudo. Por lo tanto, queda sin efecto la designación de Hernán Cabalceta Vara que con sólo el 5 por ciento de las acciones había facilitado la maniobra para que TV Azteca se apoderara de la señal del 40. Queda claro una vez más que las emisiones que TV Azteca realiza a través de ese canal, con el nombre de Proyecto Cuarenta, son ilegales. Ese canal es pirata, pues sólo puede operarlo no TV Azteca, sino la dueña de la concesión, que es la empresa Televisora del Valle de México. Ésta, por lo demás, no es deudora de TV Azteca, no mantiene con ella más relación que la de víctima de un despojo, pues las acciones en manos de TV Azteca son propiedad de Javier Moreno Valle* a título personal.
*Javier Moreno Valle está casado con Gina Diez Barroso Azcárraga, quien es la Titular de la Concesión del Canal 40-CNI.
COMENTARIOS: No nos vayamos con la finta. Los medios electrónicos están manos de dos familias únicamente. Recordemos los entretelones de la venta de Tv Azteca durante el Salinato. Emilio Azcárraga Milmo conocía tiempo atrás a Serna y a los Vargas [de Multivisión] y sabía que si bien tenían sus tamaños, podrían convertirse en una competencia real. A los otros grupos les veía posibilidades pero no le preocupaban tanto, y de todos, Azcárraga prefería tener como rival al grupo Salinas Pliego. Emilio también conocía a la familia Salinas por el negocio tradicional de las tiendas de muebles y electrodomésticos, «Salinas y Rocha». Incluso su padre, Azcárraga Vidaurreta, había tenido años atrás tratos con Hugo Salinas Rocha, abuelo de Ricardo, para poner sus radios en venta en las tiendas Salinas y Rocha. A Emilio le gustaba Salinas Pliego. Además de su nula experiencia en medios, el joven empresario había declarado, al ser nombrado ganador, que no iba a producir noticieros. Ésa era una de las condiciones que El Tigre había mantenido ante su competencia y en la mayoría de los casos lo había logrado imponer. * * * Azcárraga y Salinas Pliego se vieron personalmente en dos ocasiones. La primera, poquito después de que Radio Televisora del Centro se adjudicara los canales. Un funcionario del gabinete salinista organizó la cita y se reunieron en la oficina de Azcárraga en Televisa San Ángel, “Me da mucho gusto que seas tú. Conozco a tu familia y sé que son trabajadores,” dijo Azcárraga a su visitante. “Enhorabuena, cabrón. Bienvenido.”
Basado en © El Tigre y su imperio Televisa, de C. Fernández y A. Paxman; Grijalbo (2000).
Una sentencia emitida el lunes pasado por el juez 44 civil del Distrito Federal declaró que TV Azteca no tiene ningún derecho como accionista de Televisora del Valle de México, concesionaria del Canal 40. No lo tiene porque no es accionista, sino sólo acreedor prendario, es decir posee acciones que garanticen el pago de un adeudo. Por lo tanto, queda sin efecto la designación de Hernán Cabalceta Vara que con sólo el 5 por ciento de las acciones había facilitado la maniobra para que TV Azteca se apoderara de la señal del 40. Queda claro una vez más que las emisiones que TV Azteca realiza a través de ese canal, con el nombre de Proyecto Cuarenta, son ilegales. Ese canal es pirata, pues sólo puede operarlo no TV Azteca, sino la dueña de la concesión, que es la empresa Televisora del Valle de México. Ésta, por lo demás, no es deudora de TV Azteca, no mantiene con ella más relación que la de víctima de un despojo, pues las acciones en manos de TV Azteca son propiedad de Javier Moreno Valle* a título personal.
*Javier Moreno Valle está casado con Gina Diez Barroso Azcárraga, quien es la Titular de la Concesión del Canal 40-CNI.
COMENTARIOS: No nos vayamos con la finta. Los medios electrónicos están manos de dos familias únicamente. Recordemos los entretelones de la venta de Tv Azteca durante el Salinato. Emilio Azcárraga Milmo conocía tiempo atrás a Serna y a los Vargas [de Multivisión] y sabía que si bien tenían sus tamaños, podrían convertirse en una competencia real. A los otros grupos les veía posibilidades pero no le preocupaban tanto, y de todos, Azcárraga prefería tener como rival al grupo Salinas Pliego. Emilio también conocía a la familia Salinas por el negocio tradicional de las tiendas de muebles y electrodomésticos, «Salinas y Rocha». Incluso su padre, Azcárraga Vidaurreta, había tenido años atrás tratos con Hugo Salinas Rocha, abuelo de Ricardo, para poner sus radios en venta en las tiendas Salinas y Rocha. A Emilio le gustaba Salinas Pliego. Además de su nula experiencia en medios, el joven empresario había declarado, al ser nombrado ganador, que no iba a producir noticieros. Ésa era una de las condiciones que El Tigre había mantenido ante su competencia y en la mayoría de los casos lo había logrado imponer. * * * Azcárraga y Salinas Pliego se vieron personalmente en dos ocasiones. La primera, poquito después de que Radio Televisora del Centro se adjudicara los canales. Un funcionario del gabinete salinista organizó la cita y se reunieron en la oficina de Azcárraga en Televisa San Ángel, “Me da mucho gusto que seas tú. Conozco a tu familia y sé que son trabajadores,” dijo Azcárraga a su visitante. “Enhorabuena, cabrón. Bienvenido.”
Basado en © El Tigre y su imperio Televisa, de C. Fernández y A. Paxman; Grijalbo (2000).
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